miércoles, 24 de octubre de 2012
martes, 9 de octubre de 2012
Nuestro Planeta está cubierto en su mayoría por
agua, existen precipicios en los océanos de gran profundidad, bajo nuestras
aguas se esconden más misterios que en Marte ya que se tienen mucho más datos
de este planeta que sobre los mares más profundos, existe más fauna que en la
selva y más riqueza que en una mina de oro. Hasta el momento, ningún ser humano
ha conseguido bajar a más de 11,000 metros de profundidad. Las temperaturas son
bajísimas que sobrepasan los 0 grados centígrados, es una oscuridad absoluta y
las presiones son altísimas, existen peces que tienen que soportar el peso de
varias toneladas por cada centímetro cuadrado de su cuerpo.
Cuando aún vivía John F. Kennedy tenía serias dudas
sobre si gastar su presupuesto de ciencia en colonizar la Luna o en el estudio
de los fondos marinos. Al final, decidió enviar astronautas al lejano satélite,
pero es evidente que sus asesores científicos sabían con claridad que debajo
del océano se encuentra toda una maravilla por descubrir, un mundo tan
fascinante y desconocido como el universo.
Ya todos sabemos que el sueño de conquistar la Luna
se ha logrado, nuevamente parece retomar la ciencia la iniciativa de seguir investigando
los misterios de los fondos marinos, el hombre ha volado, viajado al espacio y
ha puesto más de 100 veces el pie sobre el monte más alto de la Tierra, incluso
ha mandado robots más allá del sistema solar para conocer más. Sin embargo aún
le falta descubrir que ocurre debajo del agua a grandes profundidades.
Japón, Estados Unidos y Francia ya han construido
sus respectivos ingenios submarinos y han relanzado así una carrera de
proporciones similares a la espacial. En 1960 se logró alcanzar los 10,912
metros de profundidad en la fosa de las marinas gracias al robot Trieste, esta
cima se encuentra en el Pacífico Occidental, desde esa fecha su record no ha
podido ser superado, en marzo de 1995, el robot japonés Kaiko se aproximo justo
hasta los 10,911 metros de profundidad, pero no pudo seguir bajando, por lo que
la marca del Trieste quedó intacta, Sin embargo el Kaiko nos pudo proporcionar
las primeras imágenes de video en tiempo real de la flora y la fauna abisal y
nos abrió la ventana a un fascinante mundo de proporciones inimaginables.
En el fondo del océano entre los 800 y 11000 metros
de profundidad se encuentra uno de los paisajes más extraños del planeta. Un
ecosistema marino determinado por las condiciones más extremas de presión y
temperatura que no se encuentran en ningún otro lugar del globo terrestre. El
bentos de los abismos acuáticos también conocido como bentos de la zona hadal o
ultraabisal, es uno de los ejemplos más asombrosos de sobrevivencia de
organismos; la escasa vida que se encuentra en estos lugares está sorprendentemente
adaptada: A la presión, a la oscuridad, a la falta de oxígeno, a la escasez de
víveres, a las bajas temperaturas que oscilan entre 5 y 1ºC. Por esto es genial
encontrar algún tipo de vida en estas condiciones. Aunque el índice de la
biomasa sea prácticamente cero, la vida existe en la zona hadal.
Aunque la vida no está totalmente
ausente en esta zona, especies e individuos son allí infinitamente menos
numerosos que en las demás regiones del mar y en los demás ecosistemas
terrestres, como por ejemplo las pluviselvas, cuya biomasa triplica la de los
abismos. Sin embargo a pesar de ser un ecosistema relativamente pequeño, sus
aportes a la biodiversidad son significativos en cuanto a la variedad de
especies presentes en él ya que muchos de los organismos que habitan estos
abismos son únicos de ellos y no se encuentran presentes en ninguna otro región
geográfica de la Tierra. ( en pocas palabras, son especies endémicas de los
abismos marinos).
Sin embargo para poder comprender
estos fenómenos es importante conocer primero cuál es el significado de
"bentos abisal". En general el bentos es el conjunto de aquellos
animales y plantas asociados con el suelo marino; es decir, bentónicas son
todas las especies que viven relación íntima con el fondo marino, éste como
gran comunidad ecológica, se extiende en el mar desde la línea de rivera, hasta
las más altas profundidades. La zona abisal es por lo tanto la zona bentónica
de los abismos, más allá de la región arquibentónica. La frontera entre las
zonas arquibentónica y abisal suele establecerse entre los 800 a 1000 metros de
profundidad. El mar profundo constituye la más dilatada de todas las regiones
de nuestro planeta líquido al cubrir cerca del 85% de lo que se conoce como
cuencas oceánicas. Así los abismos son en general inmensas cuencas de fondo
llano y fosas abisales, que forman las regiones más profundas del océano, entre
los 1000 y los 11000 metros de profundidad
Aunque la vida no está totalmente
ausente en las regiones abisales, especies e individuos son menos numerosos que
en las otras regiones del mar gracias a las condiciones ambientales ya
mencionadas: La zona abisal carece de luz solar y por lo tanto de algas; el
factor principal que limita toda la vida abisal es, pues, el aporte de alimento
forzosamente alóctono (proviene de otros lugares diferentes al lugar de vida).
En estas condiciones se le da paso a la biomasa más abundante de los
abismos:Las bacterias. Una parte de éstas son autótrofas quimiosintéticas, que
cubren sus necesidades de carbono, a expensas del ion bicarbonato, oxidando
amoniaco, hidrógeno, nitrito, metano o substancias inorgánicas.Las bacterias
son prácticamente los únicos productores por debajo de la región iluminada. Otras
bacterias, heterótrofas, se nutren a expensas de la masa orgánica disuelta que
aporta el agua circulante, así como de toda clase de cadáveres y excresiones.
La representación del mundo animal es mucho más amplia. Incluye variadas formas
de rizópodos y una gran variedad de esponjas, entre las que son especialmente
características las hexaltinélidas Entre los celentéreos se encuentran
hidrozoos, como grandes pólipos solitarios, pennatularios y actinias. Se han
encontrado 375 especies de equinodermos por debajo de los 2000 metros. Los
briozoos abisales son raros, se encuentran algunos anélidos poliquetos y los
braquiópodos se encuentran en un número muy notable. La mayor parte de
cefalópodos de profundidad son batipelágicos. Hay artrópodos (crustáceos) y vertrebrados
(peces) entre los cuales se encuentran el Barathronus, Benthobatis, etc. Estas
formas animales se dividen entre los que se alimentan de presas vivas
(depredadores), de residuos (detritívoros). Algunas formas viven en contacto
con el fondo (bentos) y por lo tanto pueden ser ya sea excavadores, fijos,
errantes o libres (o pelágicos).
Como respuesta al medio, estos organismos presentan
las siguientes particularidades:
º La
ausencia de luz lleva consigo la atrofia general de los órganos de la visión,
compensada por un alargamiento de los órganos táctiles, por lo cual se han
observado crustáceos cuyas antenas alcanzan longitudes desmesuradas.
º Por
otro lado la ausencia de luz es la posible causante de la producción de luz
orgánica (bioluminiscencia) aunque este fenómeno se le atribuye también a la luciferina.
La bioluminiscencia tiene como función la atracción de presas, así por ejemplo
el Melanoccetus murrayi , usa como cebo sus órganos luminosos.
º Otra
característica se da entre tonos rosados y violeta y por lo general también se
encuentran organismos con cuerpos transparentes. Esto se debe a que al ser
absorbidas las ondas luminosas rojas en las capas superiores del océano, el
disponer de una librea de esta coloración no representa ningún inconveniente,
ya que se hace invisible al no haber ninguna radiación que reflejar.
º Es
de suponer que el crecimiento de los seres abisales es lento y su vida muy
larga, como consecuencia de la acción similar y acumulada de la escasez de
sustento, del frío y de la presión. La escasez de alimento suspendido, exige un
cambio en la reproducción de estos grupos que dan larvas planctónicas; sus
representantes en la zona abisal pasan a producir menos huevos y cuidan por
ende más a los mismos. Un ejemplo es el del erizo Aceste bellidífera, que cría
sus hijos en una depresión dorsal de su caparazón, rodeada de espinas en forma
de pluma.
º Otra
de las características del abismo marino son las chimeneas de Geiseres, por las
cuales viaja el agua hasta el corazón del planeta calentándose hasta los 400ºC
En torno a estas calderas habitan colonias de gusanos hasta de 20 cm. de largo,
que se han acomodado en estas aguas calientes y sulfurosas. Estos gusanos son
organismos quimiosintéticos que absorben metano, compuesto letal para otras
especies.
º La
uniformidad de condiciones y lentitud de evolución se manifiestan en una menor
diferenciación específica abisal, lo cual no se da en los ecosistemas
terrestres (como la pluviselva), donde las condiciones del medio favorecen la
rápida evolución y especiación, llevando así a un aumento de la diversidad y
del número de especies en general, de 1400 en los abismos a un millón (aprox.)
en las pluviselvas.
º Además,
la biomasa abisal es débil con respecto a la de zonas horizontales: La primera
de 22 a 56 gr/m3 entre los 200 y los 500 m, y de 9 a 26 gr/m3 de los 2000 a los
9000 m. La segunda de 165 a 346 gr/m3 . Como consecuencia de esto, "el
bentos abisal es un mundo miniaturizado y mitigado. No hay manera de adivinar
el número de especies presentes".
Los camarones se encuentran frecuentemente a
grandes profundidades. Los que viven de 4 500 a 6 000 metros abajo de la superficie
del mar no son de aspecto muy diferente a los que llegan a nuestras mesas, a
excepción de que son más grandes, hasta de 30 centímetros de largo, y a veces
de color más vivo.
El camarón rojo de las profundidades, llamado
Acantephira, lanza una sustancia bioluminiscente a través de sus glándulas
situadas a los lados de la boca, con la que atrae a sus presas para
capturarlas. Otro notable camarón de los abismos, el Sergestes de color
escarlata, lleva una larga antena gruesa, flexible como látigo, en la punta
semejando una caña de pescar. De esta antena salen muchos ganchos curvos hacia
adelante, capturan a sus presas y las jalan luego hasta que quedan al alcance
de sus terribles pinzas.
Entre los equinodermos, las holoturias o pepinos de
mar de los grandes fondos son muy distintas y extrañas unas de otras; presentan
muchos apéndices y prolongaciones que hacen que apenas se reconozcan, pero
todas ellas, dentro de esta gran diversidad, tienen como rasgo común la
existencia de una superficie ventral plana que les permite deslizarse
suavemente por el fondo sin hundirse.
Las estrellas de mar se han visto a profundidades
de 4 000 metros, conociéndose unas 2 000 especies; los individuos comúnmente
tienen cinco brazos, sin embargo, también los hay con 6, 12 y aun 50 brazos;
varían de tamaño desde 2.5 centímetros de diámetro hasta varios metros.
Los ofiúridos o bailarinas de mar abundan en los
fondos oceánicos y las cámaras fotográficas han revelado grandes masas de ellas
en las profundidades, con sus brazos semejantes a culebras entrelazadas, de tal
modo que forman una sola y gruesa masa. Se han encontrado hasta 500 de ellas
por metro cuadrado y son tan frágiles que es muy difícil atraparlas con redes,
ya que muchos centenares se rompen y desaparecen por las mallas de las redes
antes de llegar a la superficie.
Los erizos de mar de las profundidades presentan
glándulas cuya picadura puede ser mortal. Otro tipo de equinodermo es el lirio
de mar o crinoideo, criaturas de largo tallo con una corona de cinco
"hojas" semejantes a plumas en su extremo. Son los primeros fósiles
vivientes dragados del mar; actualmente sus esqueletos fosilizados forman una
masa de piedra caliza de 60 a 150 metros de espesor.
Se creía que estos lirios de mar se habían
extinguido hasta que en 1850 el pastor noruego Michael Sars sorprendió al mundo
científico con algunos ejemplares vivos. Se han encontrado a profundidades
hasta de 8 200 metros y actualmente se conocen unas 800 especies.
El ecosistema marino es el de mayor tamaño que existe. Los océanos
cubren dos tercios de la superficie terrestre, 361 millones de kilómetros
cuadrados. Su volumen de 1.370 millones de kilómetros cúbicos representa el
97.6% del agua de nuestro planeta.
Los componentes abióticos del ecosistema marino son una parte líquida,
el agua, y otra sólida que la contiene, las costas y fondos. Pueden vivir en
dos ambientes muy diferentes. Las comunidades que las pueblan conforman el
Sistema pelágico y sus comunidades forman el Sistema bentónico.
La característica más importante del mar es que se extiende en las tres
direcciones del espacio, es decir, el medio es tridimensional e inestable,
destacando el fuerte dinamismo que tiene las mareas, corrientes y oleaje. En
los océanos no existen barreras geográficas como las de la tierra firme,
(desiertos, cordilleras, ríos caudalosos), existen otros factores capaces de
limitar la distribución de los seres marinos.
Las aguas marinas con profundidades medias de 3.800m y máxima de 11.000 m
(fosa de las Marianas).
Plancton. Esta formado por seres macro y microscópicos que flotan
pasivamente en el seno del agua, pudiendo ser arrastrados por los movimientos
de esta, pero realizando habitualmente amplios desplazamientos verticales. El
plancton autótrofo o fitoplancton, esta formado por protistas. El plancton
heterótrofo o zooplancton, presenta representantes permanentes o eventuales.
Entre los planctónicos encuentras: protozoos, rotíferos, celentéreos,
gasterópodos, crustáceos y procordados, larvas veliger de gasterópodos,
lamelibranquios, lavas bipinnaria y pluteus de equinodermos y formas
larvarias de peces. Este formado: por las larvas de seres que de adultos ocupan
otro sistema, como larvas trocóforas de gusanos, larvas de crustáceos.
Bentos. Compuesto por organismos que, encuentran fijados en el fondo o
se mueven. A su vez puede ser excavador, reptador o nadador próximo al fondo
.El bentos sesil incluye: algas, esponjas, celentéreos procordados y
fanerógamas marinas .los movimientos y corrientes verticales permiten el
ascenso de los nutrientes depositados en el fondo. Neutro. Formado por el
conjunto de seres microscópicos que viven en el seno del agua, desplazándose
activamente. Lo integran de los peces, cefalópodos, crustáceos y los mamíferos
marinos.
Se tiene en cuenta la profundidad de los fondos marinos, se puede
distinguir la siguiente zonación a partir de la costa: plataforma continental
(0 a 200m), talud continental (200 a 2000 m), llanura abisal (2000 a 6000m) y
zona infraabisal o hada (mas de 6000 m).Las masas de agua situadas sobre la
plataforma y el talud se denominan región o zona nerítica; las que cubre
el resto conforman la región oceánica
La región nerítica es una zona iluminada, presenta aguas muy movidas por
olas y mareas. Posee alta productividad debido a su riqueza en nutrientes que
llegan del continente. Los productores son Algas y en ocasiones fanerógamas
marinas, junto a un rico fito plancton. Respecto a la fauna, es la zona más
rica de especies, tanto de zooplancton como de interés industrial y
alimenticio, y en donde se sitúan las grandes pesquerías. El límite de las
aguas es la zona litoral. La región oceánica presenta aguas poco ricas en
nutrientes, con baja productividad. Se distingue una zona superior iluminada
(eufórica) o epipelágica, que llega hasta unos 200m; y otra inferior oscura
(afótica) o batial, que carece de organismos fotosintéticos, sustituidos por
las bacterias quimiosintéticos de los fondos. El plancton es mas pobre que el
nerítico, faltando larvas de muchas especies nectónicas y bentonitas costeras.
Características las formas avísales de peces, cefalópodos y crustáceos,
luminosos y de grandes bocas y apéndices.
Problema
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Causas
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Posible
solución
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Desequilibrio en la dinámica del ecosistema por la sobre pesca
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La
sobre pesca provoca la disminución de la capacidad de reproducción de algunas
especies, ya que actúa principalmente sobre las tallas más grandes, que
corresponden a la fracción adulta de la población y de mayor capacidad
reproductora. Asimismo, puede inducir a desequilibrios en la dinámica de los
ecosistemas. Por poner un ejemplo, el descenso de algunas especies de interés
pesquero que eran predadores del erizo de Lima ha originado un aumento de la
población de dicho equinodermo, compitiendo por los recursos alimenticios con
herbívoros tan emblemáticos como la Vieja.
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Controlar
más la pesca. Estudiar las zonas con mayor actividad pesquera y prever las
consecuencias posibles al exceso de pesca.
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Contaminación marina provocada por residuos de origen urbano
|
La
contaminación marina provocada por residuos de origen urbano trae consigo la
degradación del hábitat, simplificando la estructura de los ecosistemas con
la consecuente perdida de biodiversidad. Es aumento de materia orgánica
afecta a praderas de fanerógamas, conocidas también como sebadales que son
zonas importantes de cría de alevines y juveniles en el ecosistema litoral.
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Controlar
la industria relacionada con el ecosistema marino para que no se viertan al
mar grandes cantidades de vertidos tóxicos muy peligrosos.
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-Molestias en las poblaciones marinas
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-El
impacto que producen determinadas actividades recreativas, como la de
observación de cetáceos, que tiene lugar especialmente en el suroeste de
Tenerife afectando sobre todo a las colonias de calderón tropical y al delfín
mular. Estas actividades causan numerosas molestias sobre estas poblaciones y
suponen un riesgo por colisión.
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-Restringir
el acceso libre a estas actividades.
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Crustáceos
Los crustáceos son artrópodos – invertebrados provistos de miembros
articulados como los insectos y los arácnidos. Se caracterizan por tener el
cuerpo cubierto de una coraza cutánea formada, en parte, por carbonato de
calcio, como si fuera un esqueleto externo.
Los seis segmentos anteriores están soldados en una región no
segmentada, para formar la cabeza. El resto se puede dividir en dos regiones:
tórax y abdomen. Algunos de los segmentos toráxicos se pueden unir a la cabeza
para formar el cefalotórax.
En la cabeza, los crustáceos poseen dos pares de antenas y varios pares
de piezas bucales. Sus ojos están, a veces entre pedúnculos movibles.
Clasificación: son muchas las clases de crustáceos; sólo mencionaremos
dos:
Los malacostráceos, conforman un grupo homogéneo. A veces presentan un
abdomen largo, que termina en una aleta caudal. Como el langostino y el
camarón; otras veces presentan abdomen más o menos redondo, como el ermitaño; y
en ocasiones, presentan abdomen muy corto, como el cangrejo común y la
centolla.
Los entomostráceos, forman un grupo heterogéneo, existiendo, sin
embargo, algunas características comunes entre ellos.
Los equinodermos (estrellas de mar, erizos, etc.) tienen simetría radial
en su etapa adulta. Presentan un esqueleto interno formado por placas calcáreas
(constituidas a base de óxido de calcio, o cal). Ciertas formas presentan
también una corteza dura, con espinas defensivas. Se conocen 6000 especies
vivas y 20000 fósiles.
La capa de agua superficial que tiene suficiente luz para la
fotosíntesis se llama zona eufótica, allí el agua es muy limpia y transparente
puede alcanzar desde la superficie hasta los 100 - 130 metros de profundidad.
La zona de penumbra es la zona oligofótica, y por debajo y hasta el fondo se
encuentra la zona afótica, en la que no hay luz de origen solar.
El agua del mar lleva sales disueltas, en cantidad diferente según el
mar: el océano Atlántico entre 35 y 36 gramos por cada kilo de agua y entre 37
y 38 gramos en el mar Mediterráneo. La cantidad de oxígeno disuelto es de 5 a 8
CC por litro, en el aire hay 210 CC por litro. El agua del mar es más densa que
el aire, cerca de 800 veces más, cada diez metros de profundidad la
presión aumenta una atmósfera.
LAS COMUNIDADES MARINAS
El medio marino rebosa de formas de vida. Desde la región litoral hasta
las grandes profundidades avísales, el océano exhibe una riquísima diversidad
biológica. De los Tipos (filos) de organización que una mayoría de zoólogos
admiten, quince son endémicos del océano, diecisiete se reparten entre mares y
tierras y solo un filum es endémico de la tierra firme.
CADENAS ALIMENTICIAS MARINAS
Hay dos cadenas alimenticias (es más apropiado hablar de redes)
principales: en el sistema pelágico la cadena alimenticia de ingestión, y en el
sistema bentónico, la cadena alimenticia detrítica.
ECOSISTEMAS MARINOS
El mar es
un lugar asombroso que alberga una diversidad de especies y ambientes quizá
mayor que la terrestre. Sin embargo es aún bastante desconocido sobre todo en las
zonas más profundas. En todo el mundo existen 14 tipos de ambientes oceánicos,
de estos, 10 están presentes en el Ecuador y son: islas e islotes, arrecifes,
bancos aluviales, plataformas continentales, de fondos suaves y duros, taludes
continentales, cañones submarinos, planicies abisales, cordilleras submarinas y
fosas oceánicas. A continuación encontrará la respectiva información de cada
uno de ellos.
Arrecifes
En el
mundo hay varios tipos de arrecifes: los de barrera, los de coral, los rocosos,
los parches arréciales, entre otros. El Gran Arrecife Barrera, ubicado en la
costa noreste de Australia, es el de mayor tamaño en el planeta y está
conformado por una comunidad de al menos 2.800 arrecifes; algunos de éstos son
de barrera (conformados por coral y que actúan como rompeolas cerca del límite
de la plataforma continental), otros son pequeños parches coralinos en aguas
menos profundas, y hay más tipos. La espléndida comunidad este Gran Arrecife
Barrera se extiende a lo largo de más de 2.000 kilómetros y avanza hasta 260
kilómetros afuera en el océano. Allí vive una diversidad de especies tan grande
que ha sido comparada con la de los bosques tropicales.
En el
Ecuador no hay grandes extensiones de arrecifes coralinos como las de Australia
u otras del mar Caribe. Más bien, en la Costa los arrecifes son del tipo
rocoso, con pocos parches de coral, mientras en Galápagos las formaciones
coralinas son incipientes. En la Costa, estos arrecifes rocosos son
relativamente pequeños y tienen fuertes pendientes en lugares como las costas
expuestas, pero en las costas protegidas y semi protegidas son más extensos y
pueden alcanzar profundidades de hasta "25 metros. Los arrecifes rocosos
son relativamente escasos en el continente, pues si dividimos la línea de costa
en 25 sectores vemos que solo existen en tres.
Los
arrecifes más investigados han sido los de Galápagos y los adyacentes a las
islas, islotes y roqueños del Parque Nacional Machalilla. Estos estudios han
permitido determinar la gran diversidad de los peces de arrecife. Por ejemplo,
en el Parque Nacional Machalilla, se ha detectado más de 100 especies de peces
de arrecife: esto significa cerca de la cuarta parte del total de peces marinos
del Ecuador continental.
Cañón
submarino
Solo hay
un cañón submarino en el Ecuador, frente a la desembocadura del río Esmeraldas.
A grandes rasgos, es un ecosistema similar a los cañones terrestres, profundo y
con altas paredes, pero bajo el agua. Este cañón es todavía poco conocido.
Cordillera submarina
Hay
varias cordilleras submarinas en los mares del Ecuador, pero la más
sobresaliente es sin duda la llamada dorsal de Carnegie, cuyas cimas más altas
forman el archipiélago de Galápagos.
Fosa oceánica
Se conoce
poco sobre este ecosistema. En el Ecuador continental se extiende a lo largo de
toda la línea de costa y también está alrededor de Galápagos. La fosa oceánica
más profunda del mundo esta en
Filipinas.
Islas e
Islotes
Si bien
se podría decir que las islas e islotes son ecosistemas terrestres (porque
albergan un tipo de vegetación), también podemos observarlas como un gran
ambiente en medio del océano en cuyas zonas marinas adyacentes suceden
fenómenos particulares.
Las islas
del Ecuador no son todas iguales y podemos separarlas en dos grandes tipos: las
continentales -como la isla de la Plata, la isla Puná o la isla Santa Clara- y
las oceánicas de Galápagos. La principal diferencia entre ambos tipos son su
origen geológico: las continentales tienen uno mezcla de tectónico, volcánico y
sedimentario, mientras el archipiélago Insular tiene un origen exclusivamente
volcánico. Este constituye los picos más altos de una cordillera submarina, la
dorsal de Carnegie.
Pero
también hay diferencias entre los ambientes marinos de cada isla. Por ejemplo,
en la Isla Santa Clara y en las aguas que la rodean viven especies diferentes
que en la isla de la Plata. Asimismo, hay islotes frente al Parque Nacional
Machalilla cuyos ecosistemas marinos circundantes varían. Algunas tienen
grandes precipicios submarinos, mientras otras se sumergen pausadamente en la
plataforma submarina.
Planicie
abisal
Es un
ecosistema que se ubica entre los 3.000 y los 5.000 metros de profundidad y por
ello es bastante desconocido.
Las Plataformas Continentales de
fondos suaves y de fondos duros
La
plataforma continental es la planicie submarina que se extiende desde la línea
de costa hasta aproximadamente 200 metros de profundidad. Comprende el lecho
marino y el subsuelo de las áreas marinas. Esta planicie puede tener el fondo
suave o duro (arena o roca), y según la inclinación puede ser más ancha o
angosta. Por ejemplo, frente a la Puntilla de Santa Elena o frente al Cabo San
Lorenzo mide apenas nueve kilómetros de largo, mientras en el golfo de
Guayaquil alcanza los 120 kilómetros de largo. Se calcula que la plataforma
continental del Ecuador mide en total 29.100 kilómetros cuadrados, 12.000 de
los cuales están frente al golfo de Guayaquil: allí la plataforma es una
extensa planicie sedimentaria que va desde Guayaquil hasta la isla Puna.
Este ecosistema
marino es sumamente importante para la economía y la seguridad alimentaría del
Ecuador, pues allí vive gran parte de los recursos pesqueros. Sin embargo,
debido a la práctica intensiva de actividades y comportamientos no
sustentables, también es considerado el más amenazado entre los ecosistemas
marinos. Por ejemplo, debido a la sobre pesca y la pesca ¡legal han disminuido
las poblaciones de muchas especies, y el uso de técnicas como las redes de
arrastre conlleva la destrucción del fondo marino.
Talud Continental
El talud
continental se extiende desde el límite de la plataforma continental, a los 200
metros de profundidad, hasta los 2.000-3.000 o más metros de profundidad, según
la ubicación. Este ecosistema tiene la forma de una pendiente, a veces muy
Inclinada, y se extiende a lo largo de toda la línea de costa del Ecuador. Pese
a que es una excelente fuente de recursos pesqueros, el talud continental ha
sido poco investigado. Sin embargo, se sabe que alberga una rica diversidad de
especies, pues a principios de la década de 1990 se descubrió una singular
biota marina en el talud continental cerca de Galápagos, a 2.500 metros de
profundidad.
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